While much of the United States is now vaccinated against COVID-19, it’s important to remember that testing remains an important tool in infection control.
As the calendar approaches three years of the COVID-19 pandemic, U.S. hospitals have been overwhelmed this fall by Respiratory syncytial virus (RSV) and flu cases. Health officials are coining the term “tripledemic” and cautioning the public to continue testing and follow COVID-19 vaccine and booster recommendations.
Protect loved ones ahead of holiday gatherings by testing for COVID-19 in the case of symptoms or a known exposure.
The RADx-UP CDCC created a video and flyer in English and in Spanish to help get the word out about the continued importance of testing. These resources can be easily accessed and shared. Sample text for social media and newsletter blurbs can be found in this toolkit.
Some of the reasons that COVID-19 testing is still essential this winter include:
- Treat high-risk cases early: Vaccinated people can still get COVID-19. For people at a high risk of getting very sick, catching an infection early could mean treatment that can be effective when started in the very early days.
- Prevent resurgence: Even at very low levels, experts need to understand where levels are in order to prevent associated public health problems.
- Track variants: COVID-19 will continue to mutate causing new genetic variants to emerge. Continued testing can help catch new variants early.
- Adjust safety precautions: Testing can help public health officials gauge whether vaccinations are working to prevent specific variants and the severity of their impact. If cases rise, officials can update mask, social distancing and ventilation policies to prevent the spread.
- Assist where vaccination rates are lower: Testing remains a critical tool in communities where vaccination rates are too low to effectively reduce virus spread.
Find sample social media posts and graphics to help share these resources in the toolkit.
En medio de la “tripledemia” y las reuniones en días festivos, las pruebas de COVID-19 siguen siendo fundamentales
Si bien gran parte de los Estados Unidos ahora está vacunada contra el COVID-19, es importante recordar que las pruebas siguen siendo una herramienta importante para el control de infecciones.
A medida que el calendario se acerca a los tres años de la pandemia del COVID-19, los hospitales de los EE. UU. se han visto abrumados este otoño por los casos de virus sincicial respiratorio (VSR) y gripe.
Los funcionarios de salud acuñan el término “tripledemia” y advierten al público que continúe con las pruebas y siga las recomendaciones de la vacuna y el refuerzo contra el COVID-19.
Proteja a sus seres queridos antes de las reuniones festivas mediante la prueba de COVID-19 en caso de síntomas o exposición conocida.
El Centro de Coordinación y Recopilación de Datos (Coordination and Data Collection Center, CDCC) del programa Aceleración Rápida del Diagnóstico en Poblaciones Desfavorecidas (Rapid Acceleration of Diagnostics Underserved Populations, RADx-UP) creó un video y un folleto en inglés y en español para visibilizar la importancia continua de las pruebas.
Se puede acceder fácilmente a estos recursos y compartirlos. En este kit de herramientas, se puede encontrar texto de muestra para publicidades en boletines informativos y redes sociales:
- Video: Testing Still Matters (inglés)
- Video: Las pruebas siguen siendo importantes (español)
- Folleto: Why does COVID-19 Testing Still Matter? (inglés)
- Folleto: ¿Por qué las pruebas de COVID-19 siguen siendo importantes? (español)
Algunas de las razones por las que las pruebas de COVID-19 siguen siendo fundamentales este invierno incluyen lo siguiente:
- Tratar los casos de alto riesgo de forma temprana: las personas vacunadas aún pueden tener COVID-19. Para las personas con alto riesgo de enfermarse gravemente, detectar una infección de forma temprana podría significar un tratamiento que puede ser eficaz cuando se inicia en los primeros días.
- Prevenir un rebrote: incluso en niveles muy bajos, los expertos deben comprender dónde se encuentran los niveles para prevenir los problemas de salud pública asociados.
- Rastrear variantes: el COVID-19 continuará mutando, lo que hará que surjan nuevas variantes genéticas. Las pruebas continuas pueden ayudar a detectar nuevas variantes de forma temprana.
- Adaptar las precauciones de seguridad: las pruebas pueden ayudar a los funcionarios de salud pública a evaluar si las vacunas están funcionando para prevenir variantes específicas y la gravedad de su impacto. Si los casos aumentan, los funcionarios pueden actualizar las políticas de uso de mascarillas, distanciamiento social y ventilación para evitar la propagación.
- Ayudar donde las tasas de vacunación son más bajas: las pruebas siguen siendo una herramienta esencial en las comunidades donde las tasas de vacunación son demasiado bajas para reducir de manera eficaz la propagación del virus.
Encuentre ejemplos de publicaciones y gráficos en redes sociales para ayudar a compartir estos recursos en el kit de herramientas.
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